El arándano rojo y su efecto en la cistitis
La cistitis es una inflamación de la vejiga urinaria donde se asienta una infección bacteriana que provoca un deseo frecuente de orinar acompañado de ardor, orinas turbias y también dolor en el bajo vientre.
Es mucho más frecuente en mujeres y según los expertos, en el 90% de los casos la cistitis es causada por la bacteria E.coli (un habitante de la porción inferior del intestino).
El arándano rojo americano o cranberry puede reducir hasta la mitad el número de episodios de cistitis sufridos a lo largo de un año. Además estas bayas protegen la vejiga y el tracto gastrointestinal.
Los cranberries contienen taninos condensados que pueden evitar que las bacterias, capaces de provocar infecciones de las vías urinarias o determinadas enfermedades del estómago, se fijen en la membrana de la mucosa. Esto es lo que hace que estas bayas sean únicas. El efecto antiadherente, de la proantocianidina (PAC) hace que las bacterias E.coli fluyan con la orina, evitando así inflamaciones en la vejiga o los riñones.
El arándano rojo además es rico en antioxidantes. Protegen las células somáticas de la agresión de los radicales libres, que pueden ser causa de cáncer, diabetes, arterioesclerosis, enfermedades reumáticas y envejecimiento prematuro de la piel.
Lo habitual es prescribir antibióticos. Sin embargo, esto puede desembocar en cepas bacterianas resistentes y en una perturbación en la microflora. Pero en los casos que no se produce mejoría o aparecen síntomas más graves tales como fiebre, náuseas o dolor de espalda, es conveniente consultar a un médico; existe la posibilidad de que la infección se propague a los riñones.
Para todos aquellos aturner@s propensos a este tipo de infecciones os aconsejo que consumáis estas bayas a diario. Las puedes encontrar desecadas, en jugo, en zumo o en comprimidos. Las dosis mínima recomendada de PAC son de 36mg al día.
Un saludo
Cristina García Ansola